Cómo es el proceso de creación de la Identidad Visual Corporativa de una marca

La identidad visual corporativa proyecta a la sociedad una serie de atributos de una marca que la hacen coherente y fácilmente reconocible. La realización de la identidad visual corporativa de una marca o empresa es un trabajo que conlleva varias fases que nos conducirán a la creación de un logotipo, el diseño de la papelería básica (carta, sobre americano, tarjetas de visita, carpetas, bolígrafos…) y un Manual de Identidad Visual Corporativa, a través del cual se transmitirán los elementos constitutivos de la identidad visual, como las pautas de construcción del logosímbolo, usos adecuados e indebidos de la marca, tipografías, aplicaciones cromáticas, etc.

Vamos a explicaros el proceso que llevamos a cabo para crear la identidad visual corporativa de una marca o empresa desde el departamento de diseño gráfico de Pinchaaqui.es

  • El primer paso y más importante, es el de reunirnos con el cliente para que pueda aportarnos el máximo de información sobre su empresa, sus valores, ideales, y que nos transmita el objetivo que tiene en mente sobre la imagen que desea transmitir, con colores, preferencias, gustos, etc.
  • Tras la reunión previa y la recabación de datos necesarios para poder empezar a trabajar, realizamos una fase de información en el sector. Es muy importante nutrirnos de contenidos y de ejemplos de otras empresas o marcas relacionadas, a través de las cuales obtener conclusiones para poder iniciar nuestros diseños. De este modo, podremos crear ideas lo más adaptadas posible a los deseos y necesidades del cliente, sumadas al análisis gráfico de la actualidad del sector.
  • Con toda esta información ya podemos empezar a trabajar, llega la fase de los bocetos sobre papel. En este punto comenzamos a diseñar varios bocetos sobre papel, con los que iremos descartando opciones y eligiendo las primeras ideas claras para transmitirle al cliente.
  • Es en este momento, en el que obtenemos dos o tres ideas claras sobre las que queremos trabajar, cuando el cliente decide el camino por el que desea evolucionar, sugiriendo cambios o nuevas ideas sobre los bocetos, y comenzamos el proceso de diseño a nivel digital.

Es imprescindible una comunicación continua y clara con el cliente, para conseguir desarrollar un trabajo perfecto y de calidad.

Pero no habrá nada como la confianza absoluta en nuestros diseñadores para obtener unos resultados mucho mejores que los de las propias expectativas. 😉